por Luis García
10 julio, 2019
Desde hace unos meses ‘Crypt of the Necrodancer’ resiste inamovible en el almacenamiento de una Switch carente de espacio. No es que le haya echado muchas horas, tampoco he avanzado mucho en su propuesta de roguelike rítmico, pero lo poco que he visto me hizo entender que la aventura protagonizada por Cadence estaba hecha para alguien que vive para y por el ritmo que marca la música. El flechazo con su banda sonora fue instantáneo, aunque ha sido una amante tan compleja como completa: recorrer la obra de Danny Baranowsky a través de la mesa de mezclas me ha dado más dolores de cabeza de los que cabría esperar. Y eso que hablamos de un listado de temas repletos de chiptune, synthwave y guitarras electrónicas.
Danny Baranowsky, encargado único del score del título, diseñó a conciencia el complemento ideal para un juego que basa su avance en seguir el ritmo marcado por la música. Tracks que van de los 70 a los 145 beats por minuto con variaciones en la composición interna de algunos temas, algo poco común en música de este corte, aunque lógico y acertado por la naturaleza de la aventura que vive Cadence. Baranowsky también es el encargado de ponerle música a ‘Canabalt’, ‘The Binding of Isaac’ o el crossover de Zelda con la obra que tocamos hoy, ‘Candence of Hyrule’, además de componer el score para películas y cortos de carácter independiente. En este Continuous Play presentamos una sesión tan divertida como exigente, igual que el viaje de la protagonista de ‘Crypt of the Necrodancer’, cuyo nombre es un guiño a esos acordes finales de una composición, utilizados como clausura, que forman una analogía con ese final narrativo que Cadence persigue por la cripta del ritmo. Ahora sí, coge asiento —si puedes también unos auriculares—, dale al Play y disfruta de esta sesión.
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